miércoles, 10 de octubre de 2007

11-10-2007

Hola, aquí estoy despierta desde las 2.30 de la madrugada y desesperada de dolor y de ansiedad, he tenido un día muy malo y la noche está siendo peor, estoy depre, cansada, triste, agotada por el dolor y las preocupaciones. Ya me había hecho la ilusión de llevar a mis peques a clases de dibujo y pintura pero no va a poder ser, con la baja de mi marido y yo que no puedo trabajar, nos hemos quedado en la ruina total, ya veremos si nos toca pasar el mes comiendo patatas a todas horas, Dios mío dicen que aprieta pero no ahoga, pero a mi me está ahogando, cuando voy a salir del agujero, solo quiero criar a mis hijas con un poco más de tranquilidad sin tanto agobio para llegar a final de mes, y sin tanto cansancio y dolor para poder llevarlas de vez en cuando al parque a jugar un ratito, el otro día me atreví a bajarlas al parque y solo aguanté 10 minutos, pobrecillas cuando acababan de empezar a patinar y a jugar a la pelota, les digo que no aguanto más y que nos vamos a casa, me duele más el alma que el cuerpo de ver que no puedo llevar una vida normal, porque es todo tan injusto, y encima la familia de mi padre que no quiere entender nada, cada vez me sacan más de quicio, se creen en poder de la razón solo porque tienen dinero, bueno más bien les sobra el dinero y los pobres, les traemos sin cuidado, si hacen eso con su propia familia que no harán con los demás, y luego van a misa y se dan golpes de pecho, que verguenza, yo que me considero creyente que no practicante, me da mucha vergüenza ajena, creo que lo que me ha estropeado el día ha sido el trato recibido por mi marido en la empresa ahora que va a coger el alta (el jefe primo hermano mío), si quereís un consejo a no ser que sea imprescindible no trabajeis nunca para la familia os quieren manipular, convertir en espías, y en esclavos, bueno la esperanza es lo último que se pierde, espero poco a poco ir remontando, y no seguir sintiendo que esta vida es un asco, llevo una racha tan mala que necesito un poco de alegría y buenas noticias, últimamente no soy capaz ni de sonreír y ese no es mi carácter, yo siempre he animado a los demás con la más dulce de las sonrisas, y casi sin palabras ahora soy un ser triste y dolorido que vive los días uno detrás de otro, solo pendiente de mis niñas y mi marido, nada más me llena ni me importa. Las 6 menos cuarto de la mañana, en hora y media empiezo con los desayunos y no he dormido ni 3 horas, vaya día que me espera. hasta pronto.

1 comentario:

Pluja Fina dijo...

Te entiendo cuando dices que te duele más el alma que el cuero. A mi me pasa, también!
Me siento impotente cuando no puedo dar lo que mis hijas necesitan porqué estoy agotada. Ha habido días que hemos cenado leche con Cola-Cao y galletas, porque no tenía fuerza para hacer la cena. Me sentía tan mala madre! Me siento tan mal cuando no puedo leerles el cuento antes de acostarse porqué no me aguanto!
Estoy haciendo un esfuerzo para no culpabilizarme, y cambiar el punto de vista. A veces lo consigo y otras no! Cuando no puedo hacer la cena ahora les digo que haremos una fiesta y que vamos a comer lo que quieran ellas. Por el tema de los cuentos. Cuando tengo fuerzas se los leo. Así por la noche ya está hecho. Y no hace falta leerlos cada día!! Pero hay otros muchos temas que me angustian y no se cómo gestionar.

He visto tu blog en el foro del Institut Ferran.
Si no te importa pondré el enlace en el mío.